18/8/09

Narrar a Asunción: una necesidad

En 1925, John dos Passos escribió Manhattan transfer. Hasta ese entonces, en ninguna otra obra una ciudad - en este caso Nueva York- había llegado al punto de convertirse ella misma en el personaje principal de una novela. (Claro, con el precedente inexcusable, de tres años antes, de la Dublín del Ulises, de Joyce.) El escritor norteamericano narraba, en tiempo real, la metamorfosis de una ciudad convirtiéndose en una fabulosa monstruosidad, con su bullente reguero de seres humanos y rascacielos nacientes. Ya en 1929 vendría Berlín Alexanderplatz, de Alfred Döblin, quien puso el ojo en un forúnculo de la metrópolis alemana, el barrio, sin perder de vista la macro urbanidad. En América Latina, Carlos Fuentes escribió La región más transparente (1958), donde Ciudad de México vigila con un ojo abierto siempre a sus habitantes; Sabato mostró el mundo subterráneo de Buenos Aires, real y metafóricamente hablando, en Sobre héroes y tumbas (1961); Juan Carlos Onetti y Benedetti cifraron dos tiempos distintos de Montevideo en sus cuentos y novelas; La Habana de otros días, pero también perdurable, se muestra en Tres tristes tigres (1964), de Guillermo Cabrera Infante. Son solo ejemplos.

¿Y Paraguay? ¿Y Asunción? No se puede decir que haya "una novela de Asunción" dentro de la literatura paraguaya; y, creánme, eso se echa en falta. Hubo y hay abordajes varios de su naturaleza y su magia, pero todavía no la han convertido en un personaje con vida propia, no solo en el sentido de Dos Passos, sino en el de escritores más jóvenes de la región, que sienten lo urbano como una imposición y como una elección apasionantes: Roberto Bolaño, Efraím Medina Reyes, Juan Villoro, Rodrigo Fresán, entre otros.

Mabel Pedrozo, Luis Hernáez, José Pérez Reyes y Carlos Martini buscan, acaso por el propio influjo de sus vidas urbanas, mostrar la Asunción que ellos ven y reinventan en sus ficciones. Aquí nos cuentan qué ven y cómo ven. Tienen precursores, por supuesto; así como tendrán sucesores. (Para una idea de la narrativa urbana de escritores en su mayoría inéditos, ver el volumen colectivo Anales urbanos, Arandurã, 2007.)

Lo cierto es que Asunción necesita que la narren hoy. Reclama a gritos su imperfecta condición de musa.

* Publicado el sábado 15 de agosto en el Correo Semanal del diario Ultima Hora.