5/10/11

El Premio Nobel de Literatura

Desde el año pasado, cuando Mario Vargas Llosa ganó el galardón con el que tanto soñó, el Nobel casi me tiene sin cuidado, esperando hoy el nombre poco conocido de casi siempre. Antes que esperar que ganara algún caballo especial "mío", prefería hacer fuerza porque no lo ganara Varguitas. Es decir, no creo que, hablando estrictamente de literatura, el autor de La Casa Verde no lo haya merecido (aunque no ha escrito nada particularmente importante en mucho tiempo, La fiesta de Chivo no desmerece su firma), pero hubiera preferido que no lo ganara nunca, porque (ya se vio muestras de ello) utilizaría su finalmente encumbrado prestigio literario para justificar sus desatinos (para mí y para muchos) políticos.

La mayoría de los nombres de los candidatos que se manejan me son desconocidos. Es cierto, siempre se menciona al norteamericano Philip Roth, y después de leer hace poco Pastoral Americana, no puedo entender cómo nunca se lo dieron. Es quien quiero desde hace 5 años que gane, como si fuera mi equipo de fútbol. El del israelí Amos Oz (foto) es otro cuyo nombre suena siempre, y tal vez sea el siguiente, por el escenario político propicio: es una voz disidente del sionismo, a favor de un Estado palestino, cuando por abrumadora mayoría en la propia ONU quieren tener al país árabe como miembro.

Y en la misma consonancia con los cambios políticos en Oriente Medio, otro que aguarda expectante la decisión es el poeta sirio-libanés Adonis, sobre todo teniendo en cuenta, además
del contexto político, que desde la gran polaca Wislawa Symborszka no premian a un poeta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario